viernes, 26 de octubre de 2012

14N, Huelga General..., yo te propongo otra fecha el 21-12-2012 Inicié este blog con la intención de comentar y dar mi punto de vista sobre una línea de salida en la que creo nos encontramos. Un punto y seguido en nuestra realidad. La crisis, el cambio climático; son argumentos que nos demuestran que hemos de iniciar una nueva era en la historia del hombre. Parece dramático, pero utilizando una fecha concreta el 21 de diciembre de 2012, fecha que el calendario Maya da al fin del mundo. Deberíamos reaccionar. Los acontecimientos, las catástrofes, la crisis... estamos ante el final de nuestro mundo? Yo creo que estamos ante el final de una era y que debemos aprovecharla. Ya iré dejando posts sobre esta línea argumental, que precisamente es la que dirige mi blog. Estamos no ante un final anunciado, sino ante una oportunidad de acabar con una era que, a todas luces, se demuestra agotada. Iniciemos un movimiento social y económico que cambie por completo nuestro concepto de vida... Aunque, ahora quiero centrarme en otra fecha y en declaraciones de afines y no afines.
14N Huelga General!! un grito al que nos están empujando, una tumba que nosotros mismos estamos cavando. Primero por no aceptar la realidad, segundo por intentar solucionar una situación nueva con "parches" del pasado; los mismos que nos han conducido hasta el momento actual. A los que creen que la paralización de un país al borde del rescate solucionará los problemas les invito a conocer una figura que tienen a su alrededor. A los que creen que sus derechos laborales están siendo diezmados, a los que ven a los empresarios como enemigos les presento al AUTÓNOMO.. "Estimados señores Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo; Me presento ante ustedes que nos pintan (a los empresarios), como negreros explotadores, aves de rapiña cuyo único fin es la explotación laboral para provecho del bienestar propio. Soy el empresario autónomo. De quien depende el 99% de la contratación laboral de este país.
Ante ustedes que abogan por el derecho laboral a ultranza, que no quieren modificar ningún derecho laboral que creen que tal y como estamos ahora mismo somos "competitivos" y que no hay que modificar ninguna ley. Que creen que somos tan competitivos como Alemania o EEUU y que sin embargo usan fórmulas muy similares a Portugal y Grecia (parangones de la competitividad europea), les quiero decir como soy. Yo soy una persona con salud de hierro, dado que no puedo enfermar. Tengo lo que llamamos el sistema inmunológico del autónomo que no entiende de gripes, dolores de espalda, catarros, bajas psicológicas... Soy una persona que tiene que buscar en el diccionario lo que significa "ascentismo laboral" dado que sencillamente si hoy no trabajo, hoy no cobro. Creo incluso que tengo descendencia china, puesto que mi jornada laboral es en sí misma una jornada de 24 horas. Me gustaría compartir con ustedes mi espectacular sueldo de 900€ autoimpuesto por mi mismo, que para eso soy mi jefe, y después de una larga negociación, frente al espejo, del convenio colectivo que tenia en un rollo de papel higiénico en el baño de mi casa. Resuelto de esta manera, no sin antes incluir una cláusula de revisión de mi sueldo en base a la productividad de mi empresa y a los gastos que tuviera. Es decir que cobro si tengo beneficios. Y que siempre seré el último en cobrar. Me gustaría hablar de esos derechos laborales que defienden y que, los míos, he consultado en un libro de ciencia ficción que tengo; para lectura de ocasión, junto al papel higiénico. Ese derecho que me da la oportunidad de disponer del paro, de baja por enfermedad, de vacaciones pagadas. Y ahora me gustaría volver a compartir algo con ustedes: mi realidad. No sin antes dejar claro que: El mayor activo y orgullo que tengo en mi empresa, son mis trabajadores. Que sin mis trabajadores no estaría donde estoy, que han estado a mi lado en las duras y en las maduras, que han adaptado su sueldo y su esfuerzo a la realidad de mi empresa.
Que más que trabajadores son mi familia, compañeros del día al día, de los que podría decirle sus nombres, apellidos, familiares, novios, hijos, gustos... y hasta como suenan sus carcajadas. Que entiendo que el poder de negociación NO DEBE ser exclusivo del empresario y que el beneficio debe ser compartido entre empresarios y trabajadores creando un esfuerzo colectivo de sinergia. Mi realidad es que yo sólo cobro cuando hay dinero, que tengo que adaptarme a la situación día a día y que tengo que amoldar mi vida a la realidad actual. Que no puedo escudarme en unos derechos que no se ajustan a la realidad. Y que debo negociar cara a cara cada momento. Que son mis bienes y mi patrimonio el que garantizan una empresa, que yo soy quien corre el riesgo, que yo soy quien se juega su vida día a día. Yo soy el que debe dar derechos a los trabajadores y quien garantiza que, si por desgracia, desaparece mi actividad económica tengan un colchón. Pero soy también el único que no dispone de esos derechos. No defiendo la reforma laboral al completo, porque entiendo que el poder deber compartirse. Pero no puedo defender un sistema de convenios colectivos y sindicatos mal entendidos que no flexibilizan las condiciones en base a la realidad. Que aplican sus normas a las empresas grandes, gigantes y pequeñas. Cuya intransigencia lleva incluso al desplome de una empresa, simplemente por creer que tienen derecho individual olvidándose del colectivo. Que no ven ejemplos como empresas alemanas que prefirieron una rebaja de productividad y horas para no despedir a compañeros, claro que conllevaba una rebaja salarial, pero garantizaban los puestos de trabajo. Porque simplemente se sentaron a negociar sin llevar al límite el convenio. Pero esta reforma laboral, esta situación actual me ha permitido negociar con mis trabajadores y pasar de 1 a 7 trabajadores sin tener que "casarme" con ellos, involucrándolos en mi negocio. De poder tener 20 personas trabajando porque aceptan que su "lugar de trabajo" no esté definido como pone el convenio, en fin de semana... porque simplemente esa es mi realidad. Me ha permitido generar más de un 700% de nuevos puestos indefinidos o por obra y servicio sin poner en peligro mi empresa. Simplemente me gustaría acabar diciéndoles que yo no haré huelga el 14 y que ese día no cerraré mi empresa; aunque para ello tenga que dividirme en 7 partes.

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